¿Sientes que el dolor de oídos va más allá de lo físico? A menudo, las emociones no expresadas se manifiestan en nuestro cuerpo. Si deseas explorar cómo abordar estos conflictos emocionales y encontrar soluciones efectivas, descubre cómo la Terapia Psicogenealógica de Tres Etapas puede ayudarte.
Las patologías que se vinculan a los oídos puede tener que ver con una infección, una lesión, una herida en el oído o acumulación de cerumen.
Los problemas más frecuentes son otitis, mastoiditis, inflamaciones, eccemas, otaliga y sordera.
Puede ser temporal o permanente.
Todo síntoma o enfermedad tiene que ver con nuestro inconsciente.
Al decir de Chiozza psiconalista argentino, una enfermedad representa un drama personal e inconsciente para quien la padece.
»este drama es conocido por el sujeto, pero de forma inacabada o deformada, además de desconocer por completo la relación existente entre su enfermedad y su drama»
(Chiozza, 2007, p. 34). ¿Por qué enfermamos? La historia que se oculta en el cuerpo.
“El lenguaje –que es la enfermedad- como su significado, representan la misma fuente inconsciente, (…) que se relaciona con el órgano afectado y las fantasías ocultas; por tanto,el órgano habla mediante lo que en la conciencia se percibe como una alteración del órgano físico”
(Chiozza, 2007, p. 48) ¿Por qué enfermamos? La historia que se oculta en el cuerpo.
El síntoma o la enfermedad que experimenta una persona y tiene que ver con su vida y su historia.
En el curso «emociones y enfermedades» dedicamos una lección entera a las afecciones auditivas donde te doy algunos ejercicios para que intentes resolver esos conflictos.
CUAL ES EL SIGNIFICADO EMOCIONAL DEL DOLOR DEL OIDOS?
Cualquiera sea la patología que involucra al oído, nos impide escuchar totalmente como en el caso de una sordera o no podemos escuchar normalmente como ocurre en otras patologías.
Existe un bloqueo emocional que impide que las palabras lleguen a nuestros oídos apareciendo el dolor como síntoma .
“Conflicto: Conflicto de separación. Estoy separado o no quiero separarme de las palabras de…” Me siento agredido (sordera). Lo que me dicen u oigo, agrede lo que yo pienso o siento. Quiero separarme de estas palabras injuriosas y que me molestan en la comprensión de mi vida.
Oreja Derecha: “No oigo algo que desearía oír”.
Oreja Izquierda: “Oigo algo que no deseo oír”. ” pag 382 Diccionario de Biodescodificación Joan Marc Vilanova i Pujó
“Cualquier problema que impida oír bien es una indicación de que la persona juzga demasiado lo que oye y siente mucha ira interna. Busca taparse los oídos para no oír. Las otitis son cada vez más frecuentes en los bebés, porque a los recién nacidos les resulta difícil oír las reprimendas de los adultos”
Lisa Bourbeau pág 381
- Me siento herido, angustiado por lo que oí…
- Siento que me agraden…
- Percibo que atacan lo que siento y creo..
- Me siento enojado o irritado por lo que oi…
- Siento que me critican…
- Me siento impotente…
La solución a estas emociones que no logro procesar es: el dolor de oídos cualquiera sea la patología hasta llegar a la sordera.
¿QUÉ ES LO QUE NO QUEREMOS ESCUCHAR?
Los que oímos no nos agrada, hay algo que no nos queremos enterar. Que nos hace sentir atacados y nos produce enojo, ira, rabia, dolor, tristeza, impotencia. Lo que oímos nos duele o nos hace sentir culpables.
Al tratarse de nuestro oído derecho tiene más que ver con los sonidos provenientes del exterior. No oigo lo que me gustaría oir, lo que anhelo no lo escucho.
Si por el contrario se trata del oído izquierdo, hay algo que quiero sacar de mi o quiero que el otro escuche algo de mi.
En el caso de la sordera puede ser las palabras de una persona que te están molestando, doliendo, culpando y prefieres “cerrar” tus oídos a enfrentar a esa persona o situación. El evitar el conflicto con esa persona pero que a la vez no “quieres ya escuchar”, hace que aparezca el síntoma.
Todas las emociones acumuladas que producen esas palabras que no quieres escuchar ya sea rabia, ira, enojo, se manifiestan en el cuerpo en el dolor de oídos.
En niños el dolor de oídos es un síntoma frecuente, ya que muchas veces el frente a una reprimenda surgen emociones enojo, tristeza, frustración que el niño no logra expresar y se manifiesta en el cuerpo.
EL SIGNIFICADO EMOCIONAL DE ACUERDO A LA LOCALIZACIÓN DEL SÍNTOMA EN EL OÍDO.
Si el problema de sitúa en el OÍDO EXTERNO el conflicto se vincula a no querer escuchar. Puede tener que ver con una persona o el entorno.
Hay algo que no quiero escuchar.
Cuando el problema se sitúa en el OÍDO MEDIO el conflicto emocional se relaciona con la relación con la madre. Es algo que no acepto, puede tener que ver con críticas, burlas, promesas. Puede también que ver con la necesidad de escuchar palabras amorosas de la madre.
El OÍDO INTERNO tiene que ver con una programación relacionada el proyecto sentido desde 6 meses antes de ser concebido hasta los 3 años. Esta relacionado con conflictos de separación. Los padres vivieron estas emociones en esa etapa de mi vida. Yo no soporto dejar de oír algo que me gustaba o puede estar ocurriendo que no soporto en mi vida cotidiana ya se proveniente de personas o ruidos de mi entorno.
TOMANDO CONCIENCIA DEL SÍNTOMA.
Es importante tomar conciencia del momento en que surge el síntoma dolor de oídos, frente a que situación o personas. Las palabras de quién no quiero escuchar? Qué emociones experimentaste y no verbalizaste que te hicieron sentir enojo, ira, dolor o culpa o cualquier emoción que no expresaste.
Si logras identificar el momento en que apareció el síntoma, las circunstancias o contexto y frente a que personas ya has dado un gran paso.
Es importante que logres conectar con tu aspecto emocional que emociones emergen frente a esa situación, persona o contexto. Si sientes enojo, enfado, temor, ira, permítete sentir esa emoción y que está comunicando.
¿CÓMO PUEDO CAMBIAR?
Luego de identificar que nos está queriendo decir el dolor de oídos, cual es el significado que subyace al síntoma e identificar las emociones, Qué estás sintiendo frente a esa situación o persona, enojo? Temor? Culpa? Dolor?
Si has identificado el conflicto en tu vida presente, vinculado a algo o alguien en particular , es necesario comenzar a enfrentar la situación para intentar cambiarla. ¿Pero te preguntarás como lo hago?
Siguiendo tus emociones. Comunicándolas sin temor a lo piensen o como actúen los demás. Comunicando tu sentir frente a una determinada situación o persona sin temor a ser juzgado.
El cerrar tus oídos o el dolor en tus oídos no resuelve el problema solo te producen un malestar en tu cuerpo. Solo si lo enfrentas sos capaz de encontrarle una solución.
Siempre aprendemos de un problema. No olvidemos que el otro es siempre un espejo frente a quien proyectamos nuestro inconsciente ya sea en lo agradable como en lo desagradable.
Qué me está enseñando ese otro o esa situación? Porque me enfada o me irrita? Porque me duelen sus palabras? Qué hay de mi en “ese otro “ que me moviliza tanto al punto de no querer escuchar?
Visto de esa manera esas palabras que “no queremos escuchar” nos están ofreciendo una oportunidad de aprendizaje.
Ese aprendizaje puede tener que ver con hacerme oír, hacerme respetar en lo que pienso o en mis necesidades.
También ese aprendizaje puede tener que ver con poner un límite a una situación que estoy viviendo como problema. Aprendo a poner un límite y con ello me valoro como ser humano.
Siempre el escuchar, y escucharse posibilita un enriquecimiento y crecimiento personal y un aprendizaje.
Tal vez es a mi mism@ a quien no estoy escuchando, no escucho mis necesidades, mis deseos. En cualquier caso no me juzgo ni juzgo al otro, me perdono y perdono.
Como desarrollamos anteriormente también el síntoma puede tener que ver con el oído medio y por tanto estar vinculado con una programación que está más vinculada al proyecto sentido, a las vivencias de nuestros padres desde antes de tu nacimiento hasta los tres años.
Por tanto es importante analizar la emoción, nuestro vida actual pero también nuestra historia y la de nuestro árbol genealógico para ver si estas emociones tienen que ver con nuestros antepasados.